Hay algo que explota aquí dentro, y que quiere salir, desea arrasar con todo lo que conoce, reconfigurar e inventar una realidad paralela. Algo que tengo aquí dentro tiene una fuerza desmesurada, está cargado de ambición y tiene, con certeza, un trasfondo temeroso.
Algunos dicen haberlo visto, yo todavía desconfió de él, creo que me traicionará, no sería la primera vez. Sin embargo, parece que ahora todo está alineado y dirigido a un único fin.
Me dedico a mi trabajo, agacho la cabeza, ya será momento de celebrar resultados, pero hay algo en todo esto que me embriaga de ilusión, una sensación que recorre mi estomago y sube hasta mi garganta haciendo que expulse autoestima a borbotones. Como un avión avanza esta locura y sin frenos en el horizonte sigo elevándome.
miércoles, diciembre 19, 2012
martes, diciembre 18, 2012
Me abro en canal
Llega a mi una cantidad de información que supera mis expectativas. Proceso demasiadas cosas a ritmo de relámpago, esto frena mi capacidad de análisis.
Me dejo llevar, pero hay situaciones que me desestabilizan y me abren en canal, me revuelven las tripas y cuestionan, en ocasiones, hasta mi moralidad.
No puedo estar pasiva, tranquila, no consigo callar, ni aceptar, no sé asentir si las cosas no me convencen. Suenan todo tipo de comentarios grotescos que vilmente son manejados, sin ningún propósito. Me pregunto que es lo que quieren transmitir con todas estas palabras inconclusas.
Quiero leer mentes, analizar mentes, follar mentes.
Quiero leer mentes, analizar mentes, follar mentes.
jueves, diciembre 13, 2012
Me voy a Brasil
Cómo está el patio.
Hace siglos que no piso estas tierras bloggeras con firmeza pero últimamente he estado muy ocupada, mucho trabajo y poco tiempo para pensar, a veces tengo la impresión de que la vida frena y acelera de manera demasiado brusca, a penas te da un margen de reacción, cuando te quieres dar cuenta abres los ojos y estás en otro lugar rodeado de nueva gente y nuevos retos.
Siguen cayendo hojas del calendario y los periódicos siguen anunciando el fin del mundo desde hace ya 4 años, no creo pues que se acabe la existencia tal y como la conocemos la semana que viene, aunque no diría que no a esconderme en Brasil a la espera del cataclismo como hacen algunos.
Hace siglos que no piso estas tierras bloggeras con firmeza pero últimamente he estado muy ocupada, mucho trabajo y poco tiempo para pensar, a veces tengo la impresión de que la vida frena y acelera de manera demasiado brusca, a penas te da un margen de reacción, cuando te quieres dar cuenta abres los ojos y estás en otro lugar rodeado de nueva gente y nuevos retos.
Estas situaciones extraordinarias te hacen plantearte cosas. Estos últimos meses ha rondado mi cabeza de manera demasiado frecuente la pregunta ¿acerté? todavía no tengo muy claro como he acabado aquí, como de la noche a la mañana viré y tomé una decisión tan relevante. Lo peor de todo es que todavía el tiempo tiene demasiadas cosas que mostrarme para poder responder a esa pregunta, en cierto modo, esto me tortura con más o menos asiduidad pero no puedo seguir la utopía del tiempo y que este se haga mi fin, sería demasiado triste.
En otro orden de cosas sigo en mis trece, vagando y deambulando las noches de Sábado, escondiendo sueños en vasos de tubo sin mucho más que aportar que mi escasa gracia corporal y mi ortopedia emocional. Ya hace mucho que dejé de lamentar mi desgracia para hacerme la mayor responsable de mi bienestar. Siguen cayendo hojas del calendario y los periódicos siguen anunciando el fin del mundo desde hace ya 4 años, no creo pues que se acabe la existencia tal y como la conocemos la semana que viene, aunque no diría que no a esconderme en Brasil a la espera del cataclismo como hacen algunos.
miércoles, noviembre 21, 2012
Como se levanta la torre de arena, la del tiempo, la de las manecillas que avanzan incesantes hasta el fin de nuestros días, ellas siempre ganarán. Un paso por delante de tus elucubraciones, el argumento de mayor peso, el peor de los delirios recogido en tu muñeca, atado a ti, como tu lo estás a él.
Enredada en mi quimera, parada ante la perplejidad de lo que ocurre, soy incapaz de hacer algo distinto a nada. No quiero dejarlo pasar, pero tú tan imponente y yo tan débil, poco puedo hacer, salvo esperar a que el tiempo ponga a cada uno en su lugar, y a mi en el tuyo.
Enredada en mi quimera, parada ante la perplejidad de lo que ocurre, soy incapaz de hacer algo distinto a nada. No quiero dejarlo pasar, pero tú tan imponente y yo tan débil, poco puedo hacer, salvo esperar a que el tiempo ponga a cada uno en su lugar, y a mi en el tuyo.
domingo, noviembre 11, 2012
Controversia y psicodelia en vasos de tubo, la noche se funde con los besos cálidos que al día siguiente son lo más frío que pudiste sentir.
Siempre buscando algo más extraordinario y muriendo cada día un poquito más, pero aquí estás planteándote la felicidad en su grado superlativo absoluto. No lo has visto, no sabes qué es, serías capaz de indagar hasta el último rincón de este planeta si supieras qué es o dónde está, pero es tan fácil cansarse de nada que acabas desistiendo.Vuelves entonces a la zona cero, y te preguntas si estás mejor que antes, yo no tengo respuesta para una pregunta tan difícil. Sigue esperando nada.
jueves, octubre 25, 2012
Espejos translucidos
Era el otoño más frío, era la estación de los amores fugaces, de la irracionalidad. Moviendo ficha cada día, atajando la tristeza y mezclándola con enormes tazas de café para paliar el frío, el mismo frío que transmitía esta soledad endémica.
Morir matando el tiempo, así desperté, no había nadie en mi habitación y por mucho que me fijara el espejo seguía translucido como de costumbre.
El cielo tímido y asustado escondido entre nubes y polvo me saludaba y yo, no queriendo parecer descortés, le respondí mirando fijamente al Rey Sol. Cráneos paseaban de un lado a otro, miradas furtivas y olvidadizas me ayudaban a jugar al juego de la vida, uno de mis favoritos, en el cual yo intentaba adivinar un trocito de las vida anónimas que se cruzaban en mi camino. Pude ver inocencia, amor fraternal y mucha desilusión.
Últimamente la vida de estos extraños tenia mucho más que ofrecerme que el circulo cercano de gente que me rodeaba, es triste pero parece que se ha convertido en un hobby eso de decepcionarme, poca gente queda exenta de estar en este grupo. Como dije un día, solo sabéis escupir palabras sin saber exactamente que es lo que queréis decir, transmitís la misma confianza que un temerario trapecista atravesando la cuerda, palabras vacías para mentes aun por rellenar.
Descubrí así la importancia de la experiencia y la prudencia como forma de corresponder lo que otras personas me ofrecen, y es que por esta simple regla, nunca diré "te quieros" vacíos y al enfrentarme a situaciones desconocidas llamaré a la calma y al tiempo.
Morir matando el tiempo, así desperté, no había nadie en mi habitación y por mucho que me fijara el espejo seguía translucido como de costumbre.
El cielo tímido y asustado escondido entre nubes y polvo me saludaba y yo, no queriendo parecer descortés, le respondí mirando fijamente al Rey Sol. Cráneos paseaban de un lado a otro, miradas furtivas y olvidadizas me ayudaban a jugar al juego de la vida, uno de mis favoritos, en el cual yo intentaba adivinar un trocito de las vida anónimas que se cruzaban en mi camino. Pude ver inocencia, amor fraternal y mucha desilusión.
Últimamente la vida de estos extraños tenia mucho más que ofrecerme que el circulo cercano de gente que me rodeaba, es triste pero parece que se ha convertido en un hobby eso de decepcionarme, poca gente queda exenta de estar en este grupo. Como dije un día, solo sabéis escupir palabras sin saber exactamente que es lo que queréis decir, transmitís la misma confianza que un temerario trapecista atravesando la cuerda, palabras vacías para mentes aun por rellenar.
Descubrí así la importancia de la experiencia y la prudencia como forma de corresponder lo que otras personas me ofrecen, y es que por esta simple regla, nunca diré "te quieros" vacíos y al enfrentarme a situaciones desconocidas llamaré a la calma y al tiempo.
lunes, octubre 22, 2012
París
Hoy releí lo que escribí en ese sucio papel, mis sentimientos en aquel preciso instante eran tan confusos que apenas pude descifrarlos, hice lo que pude. Así es, hago lo que puedo, intento que el agua no alcance mi cuello para no explotar en mil pedazos, pero una no es de piedra.
¿Qué frío hace hoy aquí no? ya no sé escribir ni tres palabra bonitas juntas, será porque todo sigue tan triste como al principio.
El eco de las últimas noches sigue hoy retumbando en mi cabeza, no se calla esta maldita voz. Chispea otra vez como la primera noche, y como esa noche sigo amando París o eso dice mi ropa y su olor.
¿Qué frío hace hoy aquí no? ya no sé escribir ni tres palabra bonitas juntas, será porque todo sigue tan triste como al principio.
El eco de las últimas noches sigue hoy retumbando en mi cabeza, no se calla esta maldita voz. Chispea otra vez como la primera noche, y como esa noche sigo amando París o eso dice mi ropa y su olor.
martes, octubre 16, 2012
Recalibrar sin caos
No me gusta hablar cuando no hay nada que decir, las palabras parecen vacías y sin contenido, por ello intento que cada palabra contenga más de un significado y que a su vez demuestren lo que quiero decir.
Parece que nunca tengo nada interesante que decir, no os culpo por pensar eso, pero creedme cuando os digo que mis intenciones siempre irán acompañadas de palabras llenas.
Marchaba mi corazón un día como hoy en el que el Sol salió por donde tenía costumbre de aparecer, aunque acabó siendo un día donde volvió la sombra, el frío y el viento.
Hoy llegué pensando que era lo que tenía que decir y cómo hacerlo. Al final me di cuenta que todo aquello que rondaba mi cabeza no era capaz de transmitirlo a no ser que fuera escribiendo, narrando paso a paso qué ocurrió, aquí comienza la historia.
Hoy llegué pensando que era lo que tenía que decir y cómo hacerlo. Al final me di cuenta que todo aquello que rondaba mi cabeza no era capaz de transmitirlo a no ser que fuera escribiendo, narrando paso a paso qué ocurrió, aquí comienza la historia.
Donde se originó el caos, ahí comienza este relato. Me remonté a tiempos pasados para verte reflejados en ellos, al ver tu inestabilidad y tu falta de confianza. Lo sé,sé que nada encaja y que todo parece muy difícil, que jamás sabrás lo que quieres, que vives con miedo a equivocarte y que todo está teñido de negro color miedo.
No te culpes, yo también pensé ser el error de la ecuación pero no es así, si acaso tacha a una inocencia tardía. Debes saber que no son buenos tiempos para la inocencia, aún así, quien soy yo para juzgar a nadie, cada uno vive como puede.
Debería tener rabia o algo parecido, sin embargo no encuentro signos de ella, soy más fuerte que todo esto, he podido comprobar lo que era el dolor en muchas ocasiones y no me toca sentir eso. Ahora es la pena quien me embriaga otra vez, y es que llegué a sentir y aún siento sin querer hacerlo, no miento, después de tanto borrón y cuenta nueva era el momento de empezar de cero, me equivoqué una vez más, no era mi momento por lo visto.
Así fue como el otoño comenzó, poniendo un punto que a pesar de contener un párrafo corto con muchas palabras ha significado mucho más que eso, un punto a años de dudas sobre si de verdad había cambiado y estaba preparada, hoy sé que sí, fin del caos.
Así fue como el otoño comenzó, poniendo un punto que a pesar de contener un párrafo corto con muchas palabras ha significado mucho más que eso, un punto a años de dudas sobre si de verdad había cambiado y estaba preparada, hoy sé que sí, fin del caos.
Dejo un par de conclusiones y recalibro el rumbo, otra vez me quedo en el paraje inhóspito sin luz, otra vez será, mala suerte
sábado, septiembre 22, 2012
Errante
Vuelven mis viejas costumbres, vuelvo a mis noches de inconsciencia y a los días de preguntas. Sin ningún tipo de pudor, fuera miedos y fantasmas del pasado.
Empecé hace poco a plantearme si de verdad había puesto fin al periodo de las tinieblas y no supe responder, aún así es verdad que noto una mejoría, ya no queda tanto dolor en mi corazón ni sufro tanto como en su momento, la distancia y el tiempo han hecho esta vez bien su trabajo.
Ahora sólo deambulo por mares de incertudumbre y busco en rincones profundos eso que no tuve durante este tiempo, aquello que di y no recuperé.
Estoy bien, ¿Por qué no? año nuevo, esperanzas renovadas y muchas ganas de seguir trazando el camino, a ver qué tal
Empecé hace poco a plantearme si de verdad había puesto fin al periodo de las tinieblas y no supe responder, aún así es verdad que noto una mejoría, ya no queda tanto dolor en mi corazón ni sufro tanto como en su momento, la distancia y el tiempo han hecho esta vez bien su trabajo.
Ahora sólo deambulo por mares de incertudumbre y busco en rincones profundos eso que no tuve durante este tiempo, aquello que di y no recuperé.
Estoy bien, ¿Por qué no? año nuevo, esperanzas renovadas y muchas ganas de seguir trazando el camino, a ver qué tal
jueves, septiembre 06, 2012
Los fantasmas que pernoctan en mi cabeza fomentan mi desequilibrio, una especie de obsesión hace que cada noche vuelva al mismo punto de partida, como si nada hubiera cambiado.
Ansiedad tangible entre estás cuatro paredes, sólo pienso en huir, en salir de este circulo vicioso y escapar al lugar donde pueda encontrarme, no soporto más esta terrible inercia que me zarandea hasta acabar en el rincón del pánico.
Que nadie a tu alrededor sea capaz de transmitirte paz, tranquilidad que empiezo a necesitar, es casi igual de frustrante como el hecho de no saber localizar mi miedo
Tan perdida como de costumbre escribo intentando callar las voces que me persiguen día y noche, enterrarlas en lo más profundo para que dejen de molestar.
Intento esquivar todos aquellos cuentos para no dormir escritos por algún iluso que inventó la autoayuda, tan cargantes y repetitivos, no más por favor.
Adiós, estoy muy cansada de nada de esta nada tan profunda.
Ansiedad tangible entre estás cuatro paredes, sólo pienso en huir, en salir de este circulo vicioso y escapar al lugar donde pueda encontrarme, no soporto más esta terrible inercia que me zarandea hasta acabar en el rincón del pánico.
Que nadie a tu alrededor sea capaz de transmitirte paz, tranquilidad que empiezo a necesitar, es casi igual de frustrante como el hecho de no saber localizar mi miedo
Tan perdida como de costumbre escribo intentando callar las voces que me persiguen día y noche, enterrarlas en lo más profundo para que dejen de molestar.
Intento esquivar todos aquellos cuentos para no dormir escritos por algún iluso que inventó la autoayuda, tan cargantes y repetitivos, no más por favor.
Adiós, estoy muy cansada de nada de esta nada tan profunda.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)