Aquí explota la bomba, mis repetidas paranoias me hacen tanto daño.
El revés más tenebroso, nunca conocí herida tan grande ni profunda como la que creaste, ahora el dolor es casi inevitable así que no esperes que yo esté bien. Me pregunto si todo esto es mejor que el impasse.
No sé que pensar, ni como actuar, culpo a mi rareza emocional por llevarme a este punto de inflexión, es incomodo este dolor punzante y tu recuerdo no deja de molestarme, dormir se ha convertido en un placer desconocido.
Dejo de esperar hoy cierro capitulo, solo pretendía que me dieras permiso para olvidarte, a estas alturas todavía no sé me ha concedido tal privilegio.
Es penoso ver como se derrumba mi esperanza, aquella que construí como un castillo de naipes está cayendo empujada por una rafaga de viento huracanado, tu indiferencia.

Se acabó el llanto y el contenido gris que le estaba dando a mi vida, dejo de esconderme en las sombras de canciones que relatan historias de amores insatisfechos para ser más yo que nunca. Se acabó, juro que todo esto termina hoy.

Confesiones de madrugada

Se supone que tengo que decir algo, pero ahora mismo no encuentro las palabras exactas para describir esta sensación así que las separaré para tratar de descifrar el choque de emociones.
Feliz, así es,he conseguido superar el más temido de mis fantasmas, ese que llevaba junto a mi las suficientes noches como para odiarlo, adiós.
Hoy mi alma valiente reluce, han caído las barreras que torturaban mi conciencia, porque si mi destino es empezar de cero, si estoy evocada al fracaso y debo olvidar así lo haré, pero convencida de que lo intenté,  no es poca la valentía que he necesitado para lograr tal proeza. Hasta aquí todo resulta idílico.


Pero cuando me dispongo a enfrentarme con la cruda realidad analizo el revés de mi triunfo, que no es otro que nuestra derrota. La esperanza está en el retrete a punto de desaparecer, me enfrento a eso que llaman "pasar página" y no sé muy bien por donde empezar, ni como acabará esa odisea. Por suerte esta noche no es el momento de pensar en acontecimientos futuros, soy feliz pensando en lo fantástico del momento sin importarme mucho sus consecuencias ...

La última vez, lo prometo.

Así pasan los días mientras vosotros os amáis y yo me echo de menos en esta triste ciudad. Cerré una vez más la puerta de la esperanza cuando vi como vuestros labios se juntaban y los míos solo eran capaces de catar el sabor de la derrota, enmascarando mi dolor en risas apretadas.


Mis ojos no fueron suficientes para demostrar todo lo que sentía, hubiera necesitado demasiadas palabras para materializar aquello y dudo poder hacerlo en algún momento.


Aún así todavía intento encontrar la clave, me veo incapaz de empezar de cero sin saber si quiera lo que pudo haber pasado, prefiero mil "nos" a esta eterna agonía.


No sé si de verdad se ha agotado mi tiempo o es solo una ficción cruel, será porque he admitido que lo mejor es olvidarte.


Yo tejí esto con todo lo que tenia, agote mis fuerzas intentando abrir tus ojos para que se sincronizaran con los míos, me fue imposible. Ahora me veo como una idiota más que quiso darte eso que buscabas, aquello que ansiabas, fui una ilusa que creyó tener lo que te faltaba, la otra mitad.
Hoy te quiero como ayer pero me voy, me rindo. Por favor, evita mi huida

Guay ¿no?

Se acabó, adiós adiós 2º de Bachiller adiós
Próxima parada Universidad

Toc-Toc Selectividad ha llegado

A dos días de que comience el acontecimiento más esperado del año, y quizás de mi vida académica. Parecía que nunca llegaría pero aquí está, ha llegado la Selectividad.
Mi prioridad ahora mismo es intentar que el miedo no se apodere de mi, pero resulta casi imposible en momentos así. He de hacerlo, voy a armarme de valor, da igual lo que hayas trabajado, al final el factor nervios es más decisivo que cualquier otra cosa. Y si bien esto es algo que necesita preparación me avalan años con muchas presiones y situaciones importantes, algo que más o menos me tranquiliza. Sin embargo nunca me he enfrentado a nada parecido pero esto más que temor, hace que me sumerja en un estado de desconcierto. Todos estos años me han enseñado que las situaciones de tensión se superan con concentración, esto es poner tus cinco sentidos en lo que haces, sin presiones, tranquilidad ante todo ya que, por fortuna, el Mundo no se acaba ahí, ni mucho menos, y esto último es algo importante que a muchos se nos olvida.
Claro está, a nadie le apetece estar cuatro meses más con esta "agonía", por eso hay que intentar que no nos supere esta situación. Haz lo que sepas como sepas, no cambies tus nervios por desconfianza, ni tus miedos por inseguridad, eso no sirve de nada.
Muchas ganas de terminar, con confianza, sólo un chispa de nervios y eso sí, ¡con alegría! que esto está apunto de estallar y está vez será de felicidad.
Vamos, ¡VAMOS!

Voy a intentar crear incendios de nieve

¿Sería demasiado osado pedir que esta atracción sea algo más que un recuerdo poco nítido de una noche de verano?.

Es una situación especial en la que me encuentro, nunca antes había vivido algo que se aproximara ni un poquito a este cúmulo de sensaciones, y es que creo haber encontrado estabilidad en el caos. Parece ser este un punto de no retorno, donde el yugo del pasado deja de pesar.
Todo esto viene al caso de ti, y es que transmites lo que nunca tuve antes, paz, a pesar de que tu vida es un descontrol lleno de adrenalina y abatimiento, he podido reconocer trocitos de felicidad. Soy así de estúpida.
Debí decirlo, tendré que hacerlo, para mi se acerca una cuenta atrás inevitable, mas me faltan palabras y muy probablemente vayan a sobrar explicaciones.
Pido una vez más que acuda a mi nublada mente un poco de inspiración y entereza para afrontar el muy probable descalabro.

Voy a intentar crear incendios de nieve

calla

Te hubiera dado mi tarde, quizás no me hubiera importado dormir esa noche contigo, es más, confieso que me hubiera encantado.
Así fue como me atraparon tus ojos y sin querer estuve ensimismada en tu sonrisa un día entero, cuando pensaba que todo había acabado, apareces sin más.
Las palabras fluyeron aunque yo estuviera ausente, no tenia nada que decir, no había nada que pudiera superar ese momento, era terriblemente feliz con la nada.
No se exactamente como explicarte que soy mejor desde que te encontré e inevitablemente más insignificante y vulnerable.
Déjame decirte antes de partir algo que cada día es más evidente, que quiero estar una vez más contigo, sin horarios ni calendarios, sin prisas y sin pausas, y aunque lamentablemente presiento que mi petición no será cumplida, aún guardo algo de esperanza en el tintero.
Permíteme no hacer nada, hoy no tengo valor que malgastar y mi bola de cristal augura un nuevo fracaso

Cuarto Asalto

Entre gritos la noche ahogada me reclama en sus calles oscuras. Oigo su voz irracional pero a la vez tan satisfactoria que actúa de calmante aliviando mi conciencia en las horas más bajas, necesito más cebada mojada.

Debería dar las gracias antes de reclamar vuestra atención, que maleducada. Gracias por el premio, alegrías que te hacen resucitar, fuerzas para un momento bastante malo.
Ganas de continuar creciendo ante adversidades que parecen agujeros negros. Aprender de las mejores es la única forma que concibo de progresar.
El Jueves se acaba una etapa y empieza el 4º Asalto, camino a la Selectividad.

Las 1:34 de la mañana, una hora menos en mi cabeza

Sin apenas fuerzas, escribo angustiada con la ansiedad por las nubes.
Hoy mis huesudos dedos colocados tras este teclado parecen no estar quietos y no responder a mis movimientos, es un temblor incontrolable.
En la ciudad de lo absurdo, presa de mis propios miedos y agotada al ver caer mi torre, mi seguridad, estoy desplomándome en la calle del olvido. Mis frágiles sueños están casi tan heridos como mi alma que ya, sin esperanzas por nada ni por nadie, se esconde tras acontecimientos inenarrables y tragicomedias que marcan mi vida.
Me llama otra vez el abismo, inútil es mi esfuerzo y mis ganas de seguir nulas. Estallo y sigo al borde del colapso, rompiendo a llorar, parece no quedar nada por aquí.

Aptitud.

Barajo mis cartas y juego mi mejor opción, o eso creo, pero que pasa cuando dentro de una misma mano no soy capaz de ver que existe otra posiblidad que me haría ganar la partida.
Abren mis ojos e insisten, yo callo y aumento la dificultad, me arriesgo e incremento mi línea que separa lo posible de lo imposible. Nuevos retos, una actitud diferente, pero aún así sigo pensando que no es actitud, es aptitud.
Si no soy capaz de creer en mi será porque este proceso se ha convertido en una rutina y la frustracion alcanza ya cotas insospechadas.
Mi cajón de aptitudes es tan amplio como mi miedo, y mi fuerza de voluntad es equiparable al inegable hecho de que me es imposible confiar en mi.
Quiero creer que llegará mi momento, ese en el que seré capaz de una vez por todas de demostrar que puedo, no quiero seguir defraudando.