sábado, marzo 31, 2012

Déjame ser libre

Como encoger mi corazón y reír a carcajada limpia, sin más dolor por no tenerte cerca. No hay complejos porque mis problemas han pasado a un segundo plano, relativizando el golpe, huyendo de la fugacidad del tiempo y comprimiendo la felicidad.


Es el destino tan cruel como dicen, será porque a veces pienso en un futuro tan cercano contigo aunque para ti en cambio sea una distancias terrible e insalvable.


No te vas nunca pero a su vez estás tan lejos siempre, combinando el desafecto con la mejor de tus sonrisas, me haces sufrir el mayor de los desbarajustes. Yo te sigo entre este camino de incertidumbre y pesares tan confiada de que algún día girarás tu cabeza y veras mi figura de pie aguantando las batidas del tiempo sólo porque pienso que realmente merece la pena.


Saca las mariposas de mi estomago si crees que todo esto es imposible, déjame ser libre y quita estas cadenas que me sujetan a ti, nunca podré ser feliz si no lo haces. Pero si de verdad no lo crees quédate aquí esta noche.

domingo, marzo 18, 2012

Retales

Mientras tejo con retales de olvido destilo la brevedad de mis palabras analizando su contenido para que parezcan menos simples de lo que son en realidad.
Insuflo el aliento del verano y dejo que el tiempo llegue hasta su boca sólo para que sacie mis ganas de tenerte y de quererte.

La vida es sólo precursora de mi muerte, esa que no se va, la que duerme con mi soledad y mi forma efímera.

Es raro ver como tus manecillas giran y las mías siguen estáticas, durante ese trayecto tú me hablas de lo suyo, yo intento hablarte de lo que nunca ha sido nuestro y mencionas lo magnífico que fue tenerla.
Sigo buscando un hilo de luz en tus palabras para que encajen a la perfección con la pieza que faltaba en el puzzle.

Temblar de felicidad al verte es lo único que pretendo.

domingo, marzo 11, 2012

¿No podemos parar el reloj?


Eres la mota de polvo que cuelga de mis pestañas mientras se escapa una lágrima, aquella que indica que una vez más hoy no es un buen día para los sueños, ni para las promesas.
El presente me empuja irrefrenablemente al futuro, aunque sin ti me cueste entenderlo.
Me debato entre la soledad y mis ganas de quererte, el problema es que a día de hoy, no hay más mañana sin tu voz, porque nunca hubo nada de lo que lamentarse hasta que apareciste y abriste caminos inescrutables, senderos que mi corazón no había divisado en la brevedad del tiempo.
Con todo el poder que propaga esta llama continúo ardiendo dentro de un lago de hielo.
Entretanto tu sigues a mil kilómetros de distancia en tierra firme cegado por la ignorancia más bella, esa que tanto necesitabas, e inconsciente de mi leve quejido hundiéndose en el mar del olvido, te vas.
Aúnsigo esperando el momento para despegar rumbo a lo desconocido, sin retorno.







sábado, marzo 03, 2012

Una centésima

Estas tan cerca, tan tan cerca que mi tímido látido parece retumbar en tus oídos. Giras la cabeza y te quedas mirando mi pálido semblante mientras se dibuja una estúpida sonrisa en mi rostro. Yo me hago la loca y agacho la cabeza intentando que no se note mi satisfacción, pero para cuando me decido a devolverte el gesto tus ojos ya miran al infinito. Como de costumbre vivo a destiempo.
Ahora te alejas. Dame un abrazo antes de marchar porque el tiempo será demasiado largo si rompes este momento, porque para mi este efímero minuto supone un mundo.
Quedate un rato más y deja que sueñe una centésima de segundo.
No te vayas de aquí...